2. Miguel de Unamuno y Jugo nació en Bilbao, el
29 de septiembre de 1864, y murió el 31 de
diciembre de 1936 en Salamanca fue un escritor
y filósofo español perteneciente a la generación
del 98. En su obra cultivó gran variedad de
géneros literarios como novela, ensayo, teatro y
poesía.
3. Unamuno es uno de los escritores más importantes del
grupo llamado la "Generación del 98," preocupados por el
futuro de España ante el mundo moderno. Los escritores
identificados con la Generación del 98 abogaban por una
"europeización" de España.
Para Unamuno esa europeización debía abarcar también una
"españolización" de lo europeo. Su primer libro, En torno al
casticismo (1895), es un intento de definir lo eterno y
universal del espíritu español. Ya en este libro Unamuno
insiste en lanecesidad de que España se integre intelectual y
4. espiritualmente al resto de Europa. Otro concepto
muy importante que Unamuno planteó en su primer
libro, es la distinción entre la historia (los cambios
cronológicos e incidentales) y la intrahistoria (la
continuidad y lo esencial de los pueblos).
● La vida de don Quijote y Sancho (1905) sirve como
contraposición a la idea de la europeización de
España.
5. La obra literaria de Unamuno resiste toda
categorización. Rechazó los límites tradicionales del
género narrativo al escribir Niebla (1914), obra que
él clasificó de "nívola" en vez de "novela": "Invento
el género e inventar un género no es más que darle
un nombre nuevo, y le doy las leyes
6. que me placen." El protagonista entra en diálogo con
el autor, insistiendo que como ente de ficción es tan
auténtico como el autor de carne y hueso, y
explicando que no quiere morirse. El deseo de "ser"
del protagonista se debate contra la muerte y la
disolución de su personalidad.
8. En torno al casticismo se adelantó a las reflexiones
inducidas por el desastre del 98 y que influiría
largamente en el pensamiento español de todo el
siglo y abordó el tema de la formación y la
caracterización de España desde una perspectiva
abierta, dialéctica y conflictiva, que todavía no ha
perdido ninguna de sus incitaciones, ni ninguno de
sus riesgos.
10. Entre febrero y junio de 1874, los carlistas asediaron
Bilbao. Durante esos meses, los restos de los obuses,
los cánticos militares y las noticias del frente fueron
motivo de inocente juego para un jovencísimo
Unamuno. Años más tarde, dedicaría más de una
década a tejer sus recuerdos, artículos, fragmentos
de libros y los testimonios orales en su obra más
singular. En la misma, nos legó lo que vino a llamar
tanto una novela histórica como una historia
anovelada. La historia de la insurrección carlista
vasca y la intrahistoria de la gente que, en uno y otro
lado del frente, sufrió las penalidades de la guerra.
12. Niebla es una obra de madurez en la que convergen
los intereses esenciales del autor. El principal, el
rechazo vital a una muerte que signifique el final de
la existencia, de la vida personal. También, la
ruptura con un patrón determinado de novela
procedente de la época del realismo. Una de las
escenas más importantes muestra la confrontación
entre el protagonista, Augusto Pérez, con el propio
autor, Miguel de Unamuno, revelando el tema de la
imposible inmortalidad y la infructuosa lucha del
hombre ante tal trágico destino
14. Abel Sánchez supone la incorporación a la
trayectoria novelística de Unamuno de un nuevo
modo narrativo: el confesional. Un tema que
pertenece al acervo de la cultura y que ha sido
abordado por la literatura en todos los géneros
recibe aquí un doble tratamiento, ya que puede ser
leída como otra versión de la vieja historia de Caín y
Abel (una historia de pasión) o como el análisis de
la interioridad de un personaje. Más allá todavía de
ello, Unamuno trata de penetrar en lo que se ha
señalado como vicio histórico de los españoles, la
envidia y el cinismo.
16. “La historia de una joven que, rechazando novios, se
queda soltera para cuidar a unos sobrinos, hijos de
una hermana que se le muere. Vive con el cuñado, a
quien rechaza para marido, pues no quiere manchar
con el débito conyugal el recinto en que respiran
aire de castidad sus hijos. Satisfecho el instinto de
maternidad, ¿para qué perder su virginidad? Es
virgen madre”. Pero sobre este cañamazo
argumental teje Unamuno una obra cargada de
sentidos plurales.
18. Ángela Carballino se ha educado en la ciudad, pero
al concluir los años del colegio, el magnetismo que
irradia Don Manuel, el cura del pueblo (contado
todo por la madre de Ángela), la atrae
inexorablemente al pueblo. Lázaro, el hermano
incrédulo, que vuelve de América, rico y con un
amplio bagaje cultural laico, viene al pueblo muy
decidido a trasladar a su familia a la ciudad. El
señorito laico enriquecido parece despreciar todo lo
que huele a religión. Pero cae inmediatamente en la
cuenta de que Don Manuel no es como los otros
curas. Es un santo.
20. La colisión entre el pensamiento científico, incapaz
de dar un sentido a la vida, y la moral religiosa
carente de justificación personal provoca en
Unamuno la cuestión urgente del sentido de la
existencia. El antagonismo irreconciliable entre el
corazón y la razón, entre el todo y la nada, lleva a
Unamuno al abismo de la desesperación, donde el
hombre debe luchar siguiendo el ejemplo vitalista de
Don Quijote, cuya fe se basa en la incertidumbre.
22. Amor y pedagogía es una novela de Miguel de
Unamuno y se la considera su primera novela de
ideas. Cuenta la historia de don Avito Carrascal, que
cree que puede crear de su hijo un genio si aplica los
principios modernos de la pedagogía. La obra,
considerada una de las cuatro nivolas del autor,
constituye una dura crítica a la sociología
positivista, intercalando lo cómico y lo trágico.