Todo camino empieza por un pequeño paso. Este es mi aporte desde la realidad del círculo de Salamanca hacia la Ciudad y hacia todas las personas que esperan un cambio y que quieren implicarse en éste.

1. “En las situaciones de vida carentes de nexo de clase,
individualizadas, el destino colectivo se ha convertido en
destino personal, en destino individual con una sociedad ya
sólo percibida estadísticamente y ya no vivible, y tendría que
volver a ser compuesto como destino colectivo desde esta
fragmentación en lo personal.”
Ulrich Beck, La sociedad del riesgo
Estimadxs compañerxs:
A través de este breve documento quiero exponer las motivaciones e ideas que
me han impulsado a presentarme al Consejo Ciudadano de Salamanca. Desde
aquí, así como desde las Asambleas, Comisiones o iniciativas en las que participo,
quiero dejar claro que mi apuesta va más allá del proselitismo, es un llamado
a la pluralidad y al trabajo. Los tiempos que corren nos exigen creatividad para
reinventarnos en base a unos objetivos que estoy seguro que se encuentran en
las motivaciones que nos han llevado a dar el paso al frente y entrar en
PODEMOS. Ahora, es necesario que busquemos la manera de poner esa voluntad
sobre la mesa, es necesario que el Círculo crezca hacia afuera, es necesario
contar y dotarnos de planes sostenibles en el tiempo, empezando por las buenas
ideas que entre todxs aportamos semana a semana, que puedan poner en
marcha un proyecto en donde todxs somos necesarixs. En resumen, necesitamos
de todxs para construir nexos entre nuestra agrupación y la ciudad de
Salamanca, en un vínculo que trascienda a nosotros mismos y que busque en
la empatía y el reconocimiento mutuo la base de actuación que nos haga salir
del mero tema organizativo para liderar propuestas que vertebren la indignación
en acción, en proyecto y en lucha.
COHESIÓN:
En infinidad de oportunidades hemos escuchado frases como: “todo empieza
por uno mismo” o “la caridad empieza por casa”. Sería imposible plantear un
camino hacia afuera que no pase por la vida misma del círculo. La presencia
de diversidad de opiniones, tendencias y planteamientos, así como los sesgos
que podemos tener cada uno en base a nuestra procedencia, edad, actividad o
contexto son algo natural, enriquecedor y sano para el desarrollo de nuestra

2. formación. Sin embargo, la carencia de objetivos y trabajo común nos puede
entrampar en un bucle que nos vuelva completamente inoperantes, una comparsa
de carnaval que salga de manifestación cada vez que toque; un grupo de gente
de brillantes ideas que no sea capaz de ver que hay más cosas que las unen
que aquellas que las separan.
La teoría de las organizaciones nos da una señal muy clara al respecto, sólo
una organización cohesionada y que incluya todos los aportes desde las diversas
voces existentes puede proyectar esos objetivos hacia afuera.
AUDACIA:
Para dar pasos en la vida se necesita valor. No es sencillo dar un paso al frente
y exponer ideas, pero a veces el cuerpo y el alma lo piden como necesario.
Debo decir en mi contra que la experiencia que tengo en organizaciones políticas
se remite a estos ocho meses en Podemos Salamanca y alguna representación
estudiantil durante la carrera. Sin embargo, apelo a la audacia, a ese recurso
que nos hace plantearnos un: “Y si yo también pudiese...” Es más, creo que no
sólo yo puedo dar este paso, creo que le podemos dar todxs aquellxs que nos
sentimos responsables de algo, que sentimos que tenemos un talento o
capacidad que ofrecer a Salamanca y a Podemos Salamanca. Se habla mucho
de generosidad, lo cierto es que ni yo ni nadie podremos abarcar todos los
debates y todas las posturas, pero podemos tener esfuerzos de audacia
colectiva, de empatía hacia dentro del Círculo y de asalto hacia la Ciudad. Si
podemos llegar a aceptar y trabajar en base a unos objetivos comunes, sin
necesidad de que estemos todxs cortadxs por la misma tijera, basándonos en
un criterio de necesidad, habremos dado un primer paso hacia la transformación
social de la que todxs hemos hablado en alguna oportunidad.
NECESIDAD:
A cada momento somos testigos y protagonistas de las características de la
época en la que estamos viviendo. Todxs las conocemos y las vivimos en mayor
o menor grado. La descomposición del tejido social, la falta de perspectivas de
futuro, la precariedad, el “sálvese quien pueda”, la constante codicia de quienes
pretenden manejar nuestras vidas y nuestros proyectos es palpable y existe en
nuestro entorno, en nuestra ciudad, en toda España y en todo el mundo. Es
necesario que desde los órganos que vamos a elegir, junto con la voz de todxs
nosotrxs, se puedan plantear bien los objetivos y estrategias para sensibilizar,
concientizar, movilizar y crear el escenario favorable a la participación ciudadana
y la implicación, visible y permanente.

3. Si bien hay una estrategia marcada para las Elecciones Generales de 2015, no
nos puede bastar con acarrear votos, hay que salir a por todas. Debo reconocer
sinceramente que en muchos casos, muchas personas se limitarán a votar,
esperando que las promesas se vean cumplidas en una mejora de las políticas
públicas que puedan llevarles a vivir de acuerdo con la dignidad que todxs
tenemos como seres humanos. Sin embargo, es necesario que pongamos manos
a la obra para traducir en poder ciudadano aquellos infinitivos que se encuentran
en el párrafo anterior. A lo largo de nuestra vida y de nuestra trayectoria hemos
visto como han pasado gobiernos de uno y otro signo que han estado a merced
de la suerte que marcan los mercados, llegando en tiempos de crecimiento
económico a traducir el bienestar en consumismo y no en la participación que
nos permita construir un sistema de garantías ciudadanas, activo en tiempos de
bonanza y de escasez. No basta llegar. Desde la manera en que veo las cosas,
tanto en política como en la vida es importante el camino y nuestro camino
pasa por la Ciudad, por hacer Ciudad.
Salamanca es una ciudad atomizada socialmente, con movimientos, partidos y
plataformas ricos en propuestas y en valentía, pero que carecen de un tejido
fuerte que les permita lograr mayores conquistas. Hemos visto hace poco cómo
es que la lucha vecinal en Garrido no ha logrado sumar en torno a ella a una
cantidad importante de vecinos, de gente de a pie como nosotrxs, debido a la
carencia de un entramado que permita que sus reivindicaciones superen la
resignación, el miedo, el “yo mejor no me meto en líos”. Es cierto decir, aunque
para algunos sea políticamente incorrecto, que en los contrastes sociales
encontramos mayores o menores cargas sobre lxs ciudadanxs que hacen que
les sea más fácil emprender o no la lucha por sus derechos y la defensa de
otro modelo de Ciudad.
Para aquellos casos, en las circunstancias en las que las cargas familiares,
laborales y sociales hagan que una persona de nuestra ciudad dude en
participar, por las consecuencias que pueda acarrearle, tenemos que estar todxs,
con unos objetivos claros que desarrollen acciones en las que podamos ser un
músculo de confianza que permita que más y más gente dé el paso hacia
adelante contra este sistema. No bastan las Generales, son muy importantes,
pero el camino se hace día a día con objetivos claros y proyectos. Si el texto
de Beck, con el que inicio este documento, habla de volver a componer el
destino colectivo este es el momento y el lugar para hacerlo, no otro, quizás
no tengamos oportunidades mejores.
ACCIÓN:
Nada de lo dicho anteriormente tendría sentido sin que se traduzca en hechos.
Las declaraciones de intenciones sirven para llenar paredes enteras, pero un
ideario no se reconoce por lo elevado de sus objetivos sino por su concreción
en la práctica.

4. En estos términos, el trabajo empieza por uno mismo y mi propuesta para el
Consejo Ciudadano pasa por un plan de acción que nos permita trabajar desde
lo más cercano a las personas, la unidad en donde todxs nos reconocemos
como parte de un todo y en la que compartimos características de índole
socioeconómico pero también de afectos y de cercanía: el Barrio.
Es necesario poner en marcha toda la maquinaria del círculo hacia los barrios.
Hacia generar espacios de encuentro mutuo que excedan el cabreo, la mera
reivindicación y la estrategia electoral para que sean lugares comunes donde
poder reinventar la vida en común. Es impostergable empoderar, desarrollar el
orgullo de compartir una historia, un presente, una diversidad y un destino. Esta
labor, la que se realiza entre manifestación y manifestación, entre elección y
elección, pasa por diversas fórmulas: las propuestas políticas y la confrontación
con otras formaciones; la formación de un discurso propio, consecuente y
enraizado en Salamanca; las apariciones en los medios de comunicación, la
invitación a más personas a ser parte de Podemos Salamanca, pero sobre todo,
y en esto baso mi aporte, los proyectos a pie de calle, de diversa índole
(empoderamiento cultural, integración social, educación, sanidad, entre otros)
que pueden empezar a tejer una nueva Ciudad. En ello descansa la riqueza del
círculo y de sus comisiones: en el trabajo diario que se proyecta hacia afuera,
en base a unas líneas compartidas y que transforma Salamanca. Es la empatía
que podemos generar, siendo ciudadanos de a pie que han dado un paso fuera
del bar en el que todxs solucionamos el país y el mundo, y siendo, a la vez,
una fuerza política madura y seria que afronta con responsabilidad los
requerimientos y necesidades de lxs ciudadanxs. Somos nuestra única materia
prima y por eso mismo debemos de ver que es sólo hacia afuera que tiene
sentido nuestra presencia. Hacia adentro se generan eternas discusiones que
sólo nos hacen perder de vista lo esencial.
De esta manera, os puedo comentar que más allá de conocer o no, de manera
superficial o exhaustiva, de todos los temas que he expuesto arriba mi
experiencia pasa por haber desarrollado proyectos y haberlos puesto en marcha
de un lado y de otro del Atlántico, además de haber trabajado a pie de calle
como educador en derechos, entre otras cosas por las que no quiero extenderme
pero que puedo responder en caso que lo consideréis necesario. Lo que
propongo y lo que ofrezco al Círculo y a Salamanca es mi experiencia y mi
trabajo, así como mi convicción que todxs somos necesarios y que la riqueza
del círculo se puede poner a prueba y en marcha desde los barrios, desde lo
cercano, desde las buenas ideas que articulan personas, instituciones y generan
fuerzas de cambio. O salimos, entre todxs a por Salamanca o no seremos,
sencillamente no seremos.
Sé muy bien que por la conformación del Consejo Ciudadano hay unas áreas
asignadas y que los temas en los que me he extendido pueden encajar mejor
en unas áreas que en otras. Del mismo modo, hay compañerxs presentándose
en candidaturas individuales o listas que también son imprescindibles para que
esto sea posible. Yo lo que propongo es, de ser elegido, trabajar desde el área

5. que me sea asignada, sea directa o indirectamente por la concreción del
planteamiento aquí resumido. Y, de no ser elegido, no es una condición
inseparable, me comprometo a seguir trabajando y proponiendo tal y como he
deseado y he expuesto.
CONCLUSIÓN:
Muchas gracias por haber leído hasta aquí, este ha sido un ejercicio de
presentación y de sinceridad porque creo estar en el lugar y en el momento
adecuado para hacerlo. Ahora demos todos un paso, votéis por mi o no, que
dentro de todos los problemas, retos, oportunidades y aventuras que podemos
vencer o emprender, es más bien un tema secundario. Lo importante es ir todxs
juntxs.
Benedicto Alejandro Pedrosa Zevallos
30 de noviembre de 2011

6. ÍTACA
(Poema de K. Kavafis. Traducción de la versión de Lluis Llach)
Cuando salgas de viaje para Ítaca,
has de rogar que el camino sea largo.
Lleno de aventuras, lleno de conocimientos,
has de rogar que el camino sea largo.
Que sean muchas las madrugadas,
que entres en un puerto que tus ojos ignoraban.
Y vayas a ciudades para aprender de los que saben.
(…)
Más lejos, tenéis(*) que ir más lejos,
de los árboles caídos, que ahora os aprisionan.
Y cuando les hayáis vencido, tened bien presente no pararos.
Más lejos, siempre id más lejos,
más lejos del hoy que ahora os encadena.
Y cuando seáis liberados,
volved a comenzar con nuevos pasos.
Más lejos, siempre mucho más lejos,
más lejos del mañana, que ahora ya se acerca.
Y cuando creáis que habéis llegado, sabed encontrar nuevas sendas.
(*) Son requerimientos de la traducción. Pero si cambiamos el tiempo verbal, suena
muchísimo mejor: tenemos, hayamos, vayamos, seamos, volvamos, creamos y sepamos.