El documento describe la importancia de que los hombres tengan una visión para sus vidas que venga directamente de Dios. Señala que tener una visión clara es fundamental para que los hombres puedan cumplir con sus roles de liderazgo como líder, maestro, cultivador, protector y proveedor. Además, explica que para descubrir la visión que Dios tiene para cada hombre es necesario escuchar atentamente lo que Dios está diciendo.
2. Dios quiere que los hombres entiendan sus
tareas o funciones de dominio, y que,
entonces, desarrollen las cualidades que se
necesitan para poderlas llevar a cabo. Esta
es la manera como los hombres pueden
buscar
el propósito de Dios para su vida y la
manera como pueden crecer en la
verdadera masculinidad, porque el
propósito de Dios es la clave para nuestra
total realización.
3. La primera responsabilidad que trae
satisfacción y recompensas
espirituales al hombre es la de ser
visionario. Esta es una
responsabilidad fundamental porque
sin ella, él no puede cumplir las
otras tareas asignada a él como
líder, maestro, cultivador, protector y
proveedor.
4. El hecho de ser un verdadero
visionario es un arte que se ha
perdido en nuestros tiempos.
El hombre promedio no puede
decir quien es él porque no
tiene una visión real para su
vida.
5. Se encuentra vagando, sin ningún
propósito o se encuentra buscando
diligentemente una visión falsa, la
cual está basada en los valores de
la sociedad contemporánea, los
cuales, muy a menudo, son
exactamente lo opuesto a lo que
Dios valora.
6. Dios quiere que los hombres tengan una
visión para sus vidas que venga
directamente de Èl y que les pertenezca
a ellos en forma personal y no algo que
es dictado por el medio ambiente
cultural, o por la moda actual, o por la
religión hecha por el hombre, o por la
imagen de alguien mas que les esté
dictando como deberían ser sus vidas.
7. ¿Sabe usted hacia donde se
dirige? ¿Todavía sigue
preguntándose para qué sirve?
Estos son temas que tienen que
ver con la visión que todo
hombre debe tener y saber
responder esas preguntas.
8. “Donde no hay visión,
el pueblo se
desenfrena” Prov.
29:18
9. Se necesita visión para vivir. En el
idioma original se traduce: “un sueño,
una revelación o un oráculo”.
Obviamente, tiene que ser una visión
que está conectada a los propósitos de
Dios, y esto es algo que necesita ser
revelado por Dios mismo. Usted
necesita la revelación de Dios acerca de
la visión para su vida.
10. La única manera como usted
puede descubrir esta visión es
escuchando aquello que Dios le
está diciendo. Es es un punto
crítico que debemos conocer a
profundidad.
11. Tener visión significa ser capaz de
concebir y de moverse hacia su
propósito en la vida Un hombre no
debería casarse y entonces decirle a su
esposa: ¿Qué es lo que vamos a hacer?
Bueno, tú sabes, solo vamos a esperar
en el Señor. Vamos a ver hacia donde
nos dirigimos una vez que lleguemos
ahí.” Esto es ridìculo.
12. Ahora bien, es cierto que tal vez no
siempre podemos ver toda la
perspectiva de inmediato, de la
misma manera como Abraham tuvo
que confiar en Dios para que lo
guiara a una tierra desconocida en
donde él se iba a convertir en una
gran nación.
13. Sin embargo, Abraham tenía
una clara visión en cuanto a
que él iba a hacia el lugar que
Dios le había prometido y en
cuanto a que él se movía
firmemente hacia ese objetivo.
14. El hecho de tener visión significa que
usted ya puede ver el fin de su
propósito. Significa que usted tiene
fe en Dios y en aquello que Dios le
ha dicho, de tal manera que usted se
está moviendo continuamente hacia
su visión, a medida que esta se está
moviendo hacia usted.
16. Esta es nuestra responsabilidad,
señores, lograr llevar a cabo el
sueño de Dios para cada uno de
nosotros. Esto implica que yo debo
tener mi propia y exclusiva
comunión con el Señor para que Èl
me declare qué tiene asignado para
mí…
17. Sin esta perspectiva bien definida, mi
vida seguirá un sendero incierto sin
llegar a ningún lado, y lo que es peor,
mi familia pagará las consecuencias y
yo habré perdido la oportunidad de
abrir espacios para que mi siguiente
generación cumpla sus propósitos
para agradar a Dios.