El documento describe el trauma pancreatoduodenal, indicando que representa un desafío diagnóstico y terapéutico con una alta tasa de morbilidad y mortalidad. Las lesiones del páncreas y duodeno ocurren en el 5-10% de los traumatismos abdominales y su tratamiento depende de la gravedad de la lesión, pudiendo variar desde la hemostasia y drenaje hasta la pancreatectomía distal o la exclusión pilórica.