PIAR v 015. 2024 Plan Individual de ajustes razonables
Sentido último del universo
1. ¿Para qué ha
sido creado el
mundo?
La doctrina cristiana enseña que el
mundo ha sido creado PARA LA GLORIA
DE DIOS, y que Dios creó no para
aumentar su dicha ni para obtenerla,
sino para manifestar su perfección por
medio de los bienes que dispensa a las
criaturas.
Cuando las Escrituras y la Iglesia
hablan de la Gloria de Dios, suelen
referirse en términos generales a la
manifestación de la presencia
divina así como a la excelencia y
suma perfección de Dios.
El ser humano, dotado de cuerpo y
espíritu, se manifiesta como un don
altísimo de Dios y está particularmente
obligado a reconocer expresamente la
bondad y majestad divinas fuente única
de todos los bienes.
Adorar es por tanto, la principal misión
de las criaturas. En la adoración el
hombre reconoce que Dios es el Señor
incondicional de la vida y de la historia
por ser su creador.
Al no reconocer a su Creador y no
glorificarle el hombre imita a satanás, quien
intenta ocupar la Gloria de Dios; y el
hombre no glorifica a Dios cuando busca por
absolutos el dinero, el placer, el placer y la
ciencia
La creación es una constante alabanza a
Dios su creador, el hombre debe unir a
esta alabanza su voz alegre y confiada,
acompañada por una vida coherente y
fiel.
Fuente: El Misterio de la Creación, José Morales