PSOE y UP firman el primer gobierno de coalición. Su nuevo programa político es cuando menos inquietante.

1. LA ECONOMIA EN LA NUEVA LEGISLATURA.
Manfred Nolte
Los que ocupamos con regularidad espacios de análisis y opinión económica
echamos en falta la voz de una Autoridad independiente, esto es ajena a los
intereses de los partidos políticos, de las asociaciones empresariales e incluso de
las agrupaciones de consumidores, que como lobbies que son, tienen por misión
promocionar sus particulares ventajas sectoriales o de clase. Una autoridad
tutorial, neutral e independiente que emita una opinión no solo acerca de
resultados o estadísticas a posteriori, sino que ejerza con carácter profiláctico y
preventivo, alertando de las bondades o peligros de los programas políticos, así
como de cualquiera de las acciones de política económica que vayan ocurriendo
en nuestro entorno. Al jugar el papel de un referente, de un patrón de medición y
comportamiento puede y debe ayudar decididamente a que el público no iniciado
tenga un importante elemento de referencia. De esta manera también los
comentaristas que plasman sus opiniones en los medios de difusión cuentan con
una base contrastada.
Esto que puede sonarnos a novedoso o atrevido constituye una vieja costumbre
en otras latitudes. Citemos el caso de los Países Bajos. En Holanda, desde la
misma terminación de la segunda guerra mundial, una Autoridad independiente
emite dictámenes sobre las políticas que las administraciones centrales y locales
llevan a cabo, con particular atención a las propuestas electorales de los partidos
políticos en períodos de elecciones. Se valora no solo la viabilidad presupuestaria
de las acciones públicas sino también sus principales efectos sobre la demanda
agregada, el empleo, el presupuesto publico, y las cuentas exteriores. Una
práctica de estas características no solo aporta una información gratificante a los
ciudadanos y electores, sino que habitúa igualmente a partidos políticos y
gobiernos en el poder a un ejercicio moderado y disciplinado de sus funciones.
Pero no hay entre nosotros tal referencia y compete a otros suplantarla.
Son muchos los frentes abiertos en el ámbito económico a la nueva legislatura.
Perotodos podrían remitirse a un común denominador: las reformas, esto es, las
políticas de oferta o mejora de las estructuras productivas o funcionales de la
oferta, de la capacidad de generación eficiente del PIB y en su caso las
relacionadas con políticas de distribución de las rentas, o sea de la inclusividad
del referido PIB. Unas reformas que apenas se han acometido en meses o incluso
en años por falta de capacidad legislativa y en ausencia de una voluntad de
convergencia por parte de los parlamentarios en los distintos hemiciclos, con
especial trascendencia en el caso del de la Administración central del estado en
Madrid.
Empezando por la reforma energética para estabilizar la factura de la luz.
Siguiendo por la reforma de la educación que incluya la formación permanente
con particular énfasis en las edades tempranas y sus variantes – formación dual-
de acceso a la enseñanza superior. Para los mayores de hoy y los que lo serán en
los años venideros la reforma del Sistema de Pensiones y añadidamente el de
sanidad presenta retos descomunales. El nuevo ministro José Luis Escrivá
presenta un reconocido pedigrí, pero los consensos serán inexcusables y los

2. factores actuariales no hay quien pueda ignorarlos. Los retoques en la normativa
de trabajo deben hacer honor a la etiqueta de progresista que se arroga el nuevo
ejecutivo y no dar pasos atrás. De igual manera, el sistema de financiación
autonómica está caducado desde 2014 y su reforma constituye una de las
principales demandas de las comunidades autónomas.
El mercado debe reafirmarse como agente exclusivo en la asignación de recursos.
La vigilancia debe situarse en los excesos, pero no en promocionar un talante
iliberal. Y a la hora del presupuesto, gastar mejor que no necesariamente implica
gastar más. Las subidas de pensiones o de salarios de los funcionarios son
medidas tangenciales.
La nueva cabecera del mando de la coalición para hacer frente a estos retos no
parece descabellada. Los representantes de Unidas Podemos forman algo así
como la facción paralela ‘low cost’, pero la parte de león se la llevan técnicos del
PSOE y teóricos independientes que lanzan un relativomensaje de confianza no
solo a Bruselas sino a la opinión pública en general. Pues eso, para la nueva
agenda, ortodoxia probada, rigor, estabilidad, y experimentoslos menos posibles,
solo los imprescindibles.