Como gestionar la confianza en tu equipo de docentes. ¿Por qué hay que gestionar la confianza?
La escuela requiere de la confianza para cumplir sus fines. La desconfianza sobre el docente lo inhabilita para enseñar y la desconfianza aplicada a las capacidades de un alumno lo priva de oportunidades para aprender. Una escuela bajo sospecha es una institución deslegitimada y por lo tanto, sin poder educativo.
Cuando afirmamos que la gestión escolar incluye asumir el desafío de construir y promover la confianza, estamos entendiendo que hoy ya no puede darse por supuesta. Ya no existe la tradicional alianza entre la escuela y la familia que prevaleció en buena parte de la historia de la educación en nuestras sociedades. Tampoco la legitimidad que venía asociada al rol docente por el solo hecho de su ejercicio. En el actual contexto, los alumnos se comportan de maneras diferentes. De tal modo, parece haberse producido una recolocación de los distintos roles institucionales.
2. Diversos estudios dirigen nuestra atención a
la idea atractiva pero escurridiza de alcanzar
la confianza relacional o social como un
componente esencial para la mejora
significativa de la escuela.
Sin embargo:
¿qué es la confianza social?
¿Qué factores ayudan a moldearla?
¿Y qué beneficios produce?
3. ¿Qué es la confianza
relacional?
Las relaciones de roles diferenciados
caracterizan los intercambios sociales de
la escolarización: los profesores con los
alumnos, los profesores con otros
profesores, los profesores con los padres
y todos los grupos con el director de la
escuela.
4. Cada uno debe comprender las
obligaciones que conlleva su rol y tener
expectativas acerca de las obligaciones
de las otras partes.
Para que una comunidad escolar
funcione bien, se debe lograr un pacto en
relación con cada rol en cuanto a los
acuerdos celebrados respecto de estas
obligaciones y expectativas de las demás
personas.
5. Independientemente de la cantidad
de poder formal que cualquiera de
los roles determinados tengan en
una comunidad escolar, todos los
participantes continúan
dependiendo de los demás para
lograr los resultados deseados y
sentirse satisfechos por sus
esfuerzos.
6. La acción deliberada tomada
por cualquiera de las partes
para minimizar la sensación de
vulnerabilidad en los demás,
para que se sientan seguros y
protegidos, genera la confianza
en toda la comunidad.
7. A medida que los individuos interactúan
entre sí en una institución, constantemente
analizan las intenciones en las acciones de los
demás.
Por ello es importante organizarse en torno
a cuatro consideraciones específicas:
• respeto,
• estima personal,
• competencia en las responsabilidades de los
roles fundamentales,
• integridad personal.
8. Respeto:
La confianza relacional se basa en el
respeto social que proviene de los
tipos de discursos y acciones sociales
que suceden en toda la comunidad
escolar.
Sin respeto interpersonal, es posible
que no existan los intercambios
sociales.
9. Estima personal
La estima personal representa otro
criterio importante al determinar cómo
las personas disciernen la confianza.
Esta estima nace de la voluntad de los
participantes para extenderse más allá
de los requisitos formales de su rol
docente o de un contrato sindical.
10. Integridad personal
Las percepciones sobre la integridad
personal también conforman el
discernimiento de los individuos de que
existe la confianza.
La integridad también exige que una
perspectiva moral y ética oriente el
trabajo de cada uno.
11. Por ejemplo, los padres dependen de la ética
profesional y de las habilidades del personal escolar
para el bienestar y el aprendizaje de sus hijos. Los
profesores desean condiciones de trabajo solidarias
para su práctica, lo que depende de la capacidad del
director de la escuela para administrar de manera
justa, efectiva y eficiente las operaciones básicas de
la escuela.
La comunidad escolar valora las buenas
relaciones, pero lograr este objetivo requiere un
esfuerzo concertado de todo el personal. Los casos
de negligencia o incompetencia, si se permite que
persistan, socavan la confianza.
12. Beneficios de la confianza
La toma de decisiones colectiva
con amplia aceptación por parte
de los profesores, un ingrediente
fundamental para la reforma o
mejora, ocurre más fácilmente en
las escuelas con una fuerte
confianza relacional.
13. La confianza reduce la sensación
de riesgo que se asocia con el
cambio.
Cuando los profesionales
escolares confían mutuamente y
sienten el apoyo de los padres, se
sienten seguros para
experimentar con nuevas
prácticas.
14. La confianza relacional admite un imperativo moral
para asumir la difícil tarea de la mejora de la escuela. La
mayoría de los profesores se dedican a “su clase”. Al
implementar la “reforma o la mejora”, deben asumir
riesgos, lidiar con el conflicto organizacional, intentar
nuevas prácticas y asumir trabajo adicional, como la
participación con sus colegas en la planificación,
implementación y evaluación de las iniciativas de la
mejora.
Los profesores se preguntan, y con razón, “¿Por qué
debemos hacer esto?” Un contexto caracterizado por
una confianza relacional elevada ofrece una respuesta:
“es lo que hay que hacer.”
15. Condiciones que promuevan confianza
relacional
La confianza relacional implica mucho más que
hacer que el personal escolar se sienta bien con su
entorno laboral y con sus colegas.
Una escuela no puede lograr la confianza
relacional simplemente a través de algunos
talleres, retiros o formas de entrenamiento de la
sensibilidad, aunque estas actividades pueden
ayudar.
En cambio, las escuelas construyen la confianza
relacional en los intercambios sociales cotidianos.
16. La centralidad del liderazgo del director
Las acciones de los directores tienen un rol clave
en el desarrollo y el mantenimiento de la confianza
relacional.
Los directores establecen tanto el respeto como la
estima personal cuando reconocen las
vulnerabilidades de los demás, escuchan
activamente sus inquietudes y evitan las
arbitrariedades.
Los directores eficientes unen estos
comportamientos con una visión convincente de la
escuela y la conducta que claramente busca
favorecerla.
17. Cómo apoyar a los profesores para
que lleguen a los padres
Los padres, en la mayoría de las
comunidades escolares urbanas, siguen
siendo altamente dependientes de las
buenas intenciones de los profesores. Para
promover la confianza relacional, los
profesores deben reconocer las
vulnerabilidades de estos padres y llegar
activamente a ellos para moderarlos.
18. Otros factores claves
Una serie de condiciones estructurales facilitan que se
genere la confianza relacional en una comunidad escolar.
• Escuela pequeña. 350 alumnos o menos
• Una comunidad escolar estable: La estabilidad del
alumnado y del profesorado afecta directamente la
confianza.
• Generar y mantener la confianza depende de
intercambios sociales repetidos.
• Asociación voluntaria los participantes: que hayan
elegido de forma deliberada una escuela, que tengan
identidad con la institución.
Las relaciones entre estos factores pre-condicionan en
favor de la confianza.
19. Cómo mantener el tejido social
saludable
Las buenas escuelas dependen en gran medida
de los esfuerzos cooperativos. La confianza
relacional representa el tejido conectivo que une
a los individuos para favorecer la educación y el
bienestar de los estudiantes.
Mejorar las escuelas nos obliga a pensar más
sobre la mejor manera de organizar el trabajo de
los adultos y de los alumnos, por lo que dicho
tejido social conectivo se debe mantener
saludable y fuerte.
20. ¿Por qué hay que gestionar la
confianza?
La escuela requiere de la confianza para
cumplir sus fines. La desconfianza sobre el
docente lo inhabilita para enseñar y la
desconfianza aplicada a las capacidades de
un alumno lo priva de oportunidades para
aprender. Una escuela bajo sospecha es una
institución deslegitimada y por lo tanto, sin
poder educativo.
21. No sólo se requiere
gestionar procesos,
proyectos,
recursos materiales
o conocimiento.
También la confianza
debe ser gestionada.
22. Una gestión basada en la
desconfianza inhabilita al otro;
o sea, lo desautoriza y clausura
la posibilidad de que ejerza sus
propias capacidades y haga su
aporte a la concreción del
proyecto común.
23. La confianza habilita.
Abre el espacio para que el otro tome
decisiones y se haga cargo de las
consecuencias; apela a sus
capacidades.
Es un acto de delegación que
efectivamente “produce” y “habilita”
oportunidades para el desarrollo
profesional y el compromiso con la
propia tarea.
24. Podríamos afirmar que gestionar la confianza quizá
sea, nada más y nada menos, que habilitar la
posibilidad de la educación. Porque cada acto de
enseñanza educativa es un momento de renovación
de la confianza. Confianza en que lo que
transmitimos a los alumnos lo consideramos
valioso, ellos lo van a cuidar porque también lo
consideran así, quizá no ahora, pero sí en algún
momento futuro. Y una confianza más fuerte,
basada en que quizá los alumnos no cuiden lo que
les transmitimos, o que incluso lo destruyan; pero
que de los restos que queden y de lo que ellos
aporten va a surgir algo mejor.
25. Enseñar no es transferir
conocimiento, es crear la
posibilidad de
producirlo.
Paulo Freire