1. ¿Qué es el VIH y el SIDA?
¿Qué es el VIH?
VIH significa virus de la inmunodeficiencia
humana. Este virus puede contagiar a las
personas y disminuir sus defensas frente
a un ciertas enfermedades lo que puede
producir el SIDA.
El VIH también se considera una ITS, que
puede estar sola o acompañar a otras ITS
y que pueden favorecer su contagio si la
persona las presenta. Una vez que el virus
entra en la sangre se introduce en el
sistema inmunológico, y lo afecta dejando
a las personas indefensas frente a la
llegada de otras infecciones ya sea por
virus o gérmenes. La infección que
provoca el virus es de desarrollo lento,
pueden pasar años hasta que se
manifieste la enfermedad, tiempo en el
el cuerpo mantiene una dura lucha.
Durante este período no hay molestias
que indiquen si hay o no virus en el
organismo, pero la persona ya es
portadora del virus o seropositiva, y por
ello es capaz de transmitirlo. El VIH vive
en los seres humanos, fuera del cuerpo
sobrevive 1 a 3 horas. Se encuentra en
mayor cantidad en la sangre, el semen,
los líquidos vaginales y la leche materna.
¿Qué es el SIDA?
SIDA significa Síndrome de Inmuno
Deficiencia Adquirida y es el conjunto de
enfermedades que se producen por el
debilitamiento del sistema inmune, por lo
que la persona se hace más sensible a
tener infecciones repetidas o cánceres de
diverso origen, porque no puede
defenderse.
El SIDA es una enfermedad nueva. Su
aparición fue en los años 80 y los
primeros casos fueron de personas
homosexuales. Es un problema no
explicado por completo y en su origen hay
muchas teorías. Con el paso de los años
se ha ido convirtiendo en una de las
enfermedades más preocupantes para el
mundo entero.
¿Cómo se transmite el VIH?
El virus puede pasar de una persona a otra a
través de 3 vías:
Sexual,
Sanguínea
De madre a hijo.
Dentro de la vía sexual se puede producir
cuando tiene lugar una penetración (vaginal,
oral o anal) sin protección, es decir, sin
utilizar un preservativo.
La transmisión por vía sanguínea se puede
producir cuando se comparten jeringuillas,
material de uso personal cortante o que
contenga sangre (utensilios de afeitado,
cepillos de dientes...) o por hacerse piercings
o tatuajes con material que no haya sido
esterilizado antes.
La transmisión del virus de madre a hijo
(denominada también en ocasiones
transmisión vertical) puede producirse
durante el embarazo, en el momento del
parto o por medio de la lactancia materna.
En contra de algunas creencias populares,
fruto del desconocimiento, el VIH no se
transmite por actos de convivencia tales
como compartir cama, comida o utilizar el
mismo lavabo. Tampoco por abrazar, besar o
dar la mano a una persona infectada ni por la
picadura de un mosquito.
2. ¿Cómo protegerse del VIH?
Teniendo una pareja sexual exclusiva que
no esté contagiada. Se debe acordar y
respetar entre ambos miembros de la
pareja mantener relaciones sexuales
exclusivas. Previamente, se debe
comprobar a través de un examen que
ambos no tienen el virus.
Usando el condón o preservativo de
manera correcta y en todas las relaciones
sexuales. Si se tienen relaciones sexuales
con penetración (vaginal, en la boca o en
el ano) utilizar siempre CONDÓN en
forma correcta y en todas las relaciones
sexuales. Además si hay otras ITS que
producen heridas se favorece el contagio.
Es muy importante aprender a “negociar”
la utilización del condón con todas las
parejas sexuales, principalmente las
mujeres, que tienen más posibilidades de
infectarse. El CONDÓN es una de las
formas más seguras para no contraer el
VIH.
Si se ha decidido tener un/a hijo/a,
consultar previamente al médico o la
matrona. Si la mujer embarazada está
viviendo con el VIH puede tomar
medicamentos para evitar la transmisión
del virus a su hijo/a.
Tratamiento del VIH
1. Tratamientos antivirales: Los
tratamientos de esta categoría tratan de
detener de una forma u otra el avance
del virus dentro del cuerpo. Por
ejemplo, AZT, ddI y ddC interfieren en la
producción de la transcriptasa inversa,
que es una proteína necesaria para
infectar nuevas células. Los inhibidores
de proteasa, en cambio, funcionan
impidiendo que el virus utilice la enzima
de la proteasa, que es un componente
esencial para la reproducción del virus.
2. Inmunomoduladores: Los tratamientos
en este grupo tratan de mejorar la
capacidad del cuerpo de atacar al VIH y
de fortalecer la respuesta del sistema
inmunológico contra el VIH. Por
ejemplo, algunas vacunas
experimentales están tratando de
fortalecer al sistema de defensas hasta
el punto en que éste pueda deshacerse
del VIH.
3. Tratamientos y profilaxis contra
enfermedades oportunistas: Aunque no
hay todavía una cura para el SIDA,
muchas de las enfermedades que atacan
a personas con SIDA pueden
controlarse, prevenirse o eliminarse.
Esto ha aumentado significativamente la
longevidad y calidad de vida de las
personas que viven con Sida.