1. Comenzábamos este curso académico 2022-23 con la sugerente ima-
gen del salmo 137, propuesta por nuestro Obispo Mons. Luis Ángel de
las Heras, en su carta pastoral ante el nuevo curso: “Junto a los ríos de
la alegría”. Ahora, al finalizar el curso, damos gracias a Dios por haber
disfrutado de los caudalosos ríos de la alegría que el Señor nos dispensa.
Al mismo tiempo, le agradecemos el habernos dado la oportunidad de
acercar el cauce de la alegría a nuestros alumnos y sus familias. A tra-
vés de nuestro empeño y del trabajo bien hecho nuestros alumnos han
podido descubrir las maravillas del Señor convertidas en historia de la
salvación que se hace historia personal en las innumerables gracias de
su amor desmedido.
Ahora llega el tiempo de cerrar el
curso; en él no han sido pocos los
sobresaltos y preocupaciones, tam-
bién las sorpresas y alegrías; es pre-
ceptivo evaluar a los chicos y muy
aconsejable evaluar nuestra actitud
en el desempeño de nuestra misión
eclesial. Cerrar adecuadamente el
curso nos abre al descanso mereci-
do y saludable. Todos necesitamos
recuperar fuerzas para ganar en
entusiasmo el próximo curso, pues
sólo el entusiasmo personal hace
que la tarea docente sea incisiva y
significativa. Feliz verano para
todos.
Jesús Miguel Martín Ortega
1
Número
13
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DESDE PRIMARIA
Ya son 15 años como profesora de Re-
ligión en los CRA de Riaño y Posada de
Valdeón.
Me proponen escribir unas palabras y lo
único que viene a mi mente es agradeci-
miento.
Agradecimiento a todos los compañe-
ros que han pasado por estos dos CRA
(que han sido muchos) por ayudarme
cuando se lo he pedido, por las charlas
y comidas compartidas, donde hemos
hablado de todos los temas sin crispa-
ción y con respeto.
Agradecimiento a los profesores de Religión de otros colegios. Para mí ha
sido muy importante poder contar con ellos. Y a los responsables de la Dele-
gación Diocesana de Enseñanza por poder recurrir a ellos en cualquier mo-
mento, por informarnos e incluso, a veces, por ponernos un poco las pilas.
También quiero dar las gracias a los padres de mis alumnos por la confianza
y el respeto que siempre me han mostrado. Y decirles que no tengan nin-
guna duda de que esta asignatura aporta muchas cosas buenas a sus hijos.
Me siento muy agradecida por ser profesora de Religión, asignatura que me
apasiona y por haber podido compartir tantas cosas con los alumnos, por
aprender de ellos y ellos de mí, por tener en nuestra asignatura al mejor
Maestro, por aprender de los libros y de todas las cosas que nos pasan, de
lo bueno y de lo malo, por el cariño que me muestran.
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No todo ha sido un camino de rosas.
Es una zona donde nieva mucho y siempre está la preocupación de cómo
estará la carretera. Al principio era muy atrevida pero después de varios sus-
tos le he cogido miedo a la nieve. Anécdotas tengo unas cuantas: recuerdo
que una vez me salí de la carretera y, gracias a Dios, al poco tiempo pasó
gente de Soto y Posada de Valdeón y me sacaron el coche a la carretera con
un todoterreno. Lo bueno es que en esta zona la gente siempre te ayuda.
Otra vez estuvimos parados cuatro horas en el puerto de Pontón porque un
camión quedó atravesado y tuvieron que venir los de tráfico y una pala ex-
cavadora… Otra vez también en Pontón no podían cruzarse una furgoneta
y un coche. Tuvieron que venir los del MOPU y quitar nieve a palazos…
A veces también ha habido cosas que me han dolido porque no las he en-
tendido. Pero, al final, por mi forma de ser siempre me quedo con lo positi-
vo.
Os deseo a todos un feliz verano.
Belén
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DESDE SECUNDARIA
El método agustiniano en educación
En el año 400, el diácono Deogracias, escribía a San Agustín mostrando su
preocupación, necesitaba consejo de cómo debía exponer las verdades de la
fe y qué método debía seguir para lograrlo. Han pasado 1623 años, y sigue
siendo una preocupación para buena parte del profesorado de religión.
San Agustín respondía en un texto “catechizandis rudibus” que conserva una
sorprendente actualidad. Proporcionaba una serie de consejos pedagógicos
sobre cómo suscitar el interés del alumnado, el clima de alegría que debe
existir en la enseñanza y la adaptación a los diversos auditorios, utilizando la
metodología del amor y la amistad sinceros.
Una vez que conocemos las dificultades (psicológicas, espirituales, sociocul-
turales…) del oyente, debemos adaptar el lenguaje, pero utilizándolo con
mucha dulzura, porque no existe educación más efectiva que la educación si
es afectiva. Y aunque podemos pensar que resulta difícil adaptarnos al alum-
nado, si nos inspiramos en el amor y la caridad, entonces esa adecuación se
vuelve agradable.
Leyendo a San Agustín, me viene a la cabeza los cambios que se han pro-
ducido en los últimos años en educación. Se ha pasado de un modelo tradi-
cional, a un modelo de enseñanza constructivista que sitúa al alumnado en
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el centro de todo el proceso de enseñanza-aprendizaje, teniendo en cuenta
su diversidad, adaptando el ritmo a sus diferencias y estilos de aprendizaje
individuales.
El docente debe guiar a sus alumnos a través del proceso de enseñanza-apren-
dizaje, mostrándoles el camino. Pero, ¿cuál es el camino correcto? Si Jesús es
el Camino, ya sabemos cuál es la dirección. Por lo tanto, el profesorado de
religión debemos señalar el camino a Cristo como la dirección correcta en
la que se debe caminar. Cristo es la meta para determinar el progreso de los
alumnos, que deben llegar a decir ya no vivo yo, sino Cristo en mí.
Más de una vez, durante los últimos años de docencia en el IES Giner de
los Ríos, me he preguntado: ¿estoy utilizando el método agustiniano, o el
nuevo modelo de enseñanza-aprendizaje? Llamémoslo de una forma o de
otra, lo que está claro es que me he centrado en el aprendizaje del alumna-
do, teniendo en cuenta sus circunstancias, comportamiento, influencias, y
diferencias. Una enseñanza individualizada, de la que hablaba San Agustín,
en la que me he servido de metodologías activas (aprendizaje por proyectos,
retos, gamificación…) para suscitar el interés y la curiosidad del estudiante.
Además, para acompañar y guiar al alumnado en el salto “de lo exterior a lo
interior; de lo interior a lo superior”, que San Agustín consideraba el verda-
dero método educativo, he intentado, siguiendo sus enseñanzas, desterrar
de las aulas la tristeza y la preocupación, que pueden enturbiar la enseñanza,
llevando la confianza, el diálogo, la caridad, la alegría, y el amor, siempre que
me ha sido posible. ¿Lo he logrado? El tiempo lo dirá. Mientras tanto seguiré
enseñando desde el amor.
Belén
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El 15 de junio se presentó en la sede de la CEE el congreso La Iglesia en la Edu-
cación. Presencia y Compromiso que tendrá su sesión final el sábado 24 de fe-
brero de 2024 en Madrid. Renovar la presencia y compromiso de la Iglesia con
la educación es el objetivo de este congreso que desde octubre de 2023 hasta
febrero de 2024 promoverá la participación y el encuentro de los distintos ám-
bitos educativos en los que está presente la Iglesia.
También se presentó la página web
https://haciaelcongreso2024.educacionyculturacee.es/
donde se puede encontrar toda la información sobre el congreso y que será
una herramienta de comunicación a lo largo de los próximos meses.
Se ha situado la celebración de este congreso como respuesta a la iniciativa
del Pacto Educativo Global promovido por el papa Francisco y a la Instrucción
del Dicasterio para la Educación Católica La identidad de la escuela católica para
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una cultura del diálogo. Son para nosotros, se indicó, una invitación a tomar
mayor conciencia de la presencia histórica de la Iglesia en el campo de la edu-
cación y de la escuela como parte del cumplimiento de su misión propia y de
su significado para toda la sociedad.
Se propone ofrecer un espacio de reflexión e intercambio y plantea a toda la
comunidad educativa hacer juntos un itinerario en el que se haga visible la
presencia de la Iglesia en la educación, su servicio a las personas y a la socie-
dad, así como su aportación al diálogo público sobre la educación. Este proce-
so comenzará en octubre y culminará encontrándonos todos el 24 de febrero
de 2024.
Estos encuentros previos se van a convocar en torno a nueve grandes ámbitos
en los que la Iglesia está presente con su identidad e ideario cristiano:
1. Colegios de ideario cristiano.
2. Profesorado de Religión Católica.
3. Profesorado cristiano en los diversos centros de enseñanza.
4. Centros de Educación Especial.
5. Centros de Formación Profesional.
6. Universidades Católicas y Centros Universitarios.
7. Colegios Mayores y Residencias Universitarias.
8. Educación no formal, voluntariado, tiempo libre y otros proyectos cultura-
les.
9. Parroquia-Familia-Escuela.
Se trata de una tarea que solo puede hacerse y tiene sentido con la participa-
ción de todos.
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Aquí tenemos un pequeño álbum fotográfico con imágenes
de este curso 2022-2023:
https://www.youtube.com/watch?v=ENI7bfPvl0A
Ejercicio práctico para educadores
Seguramente hoy estás cansado. Este curso llega a su fin…
Haz una lista con aquellas cosas que crees
que deberían hacer por ti quienes se rela-
cionan contigo…
Pues bien, eso mismo es lo que tú debes
hacer hoy por los demás.
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