La circulación fetal se caracteriza por tres cortocircuitos que permiten derivar la sangre lejos de los pulmones no funcionales hacia otros órganos: el ductus arterioso de Botal, el foramen oval y el conducto venoso de Arancio. La sangre rica en oxígeno proveniente de la placenta llega a través de la vena umbilical principalmente al hígado y al corazón derecho fetal. Luego es bombeada a los órganos vitales como el cerebro a través de estos cortocircuitos antes de regresar