Este documento define el liderazgo como la capacidad de influir, organizar y motivar a otros para alcanzar objetivos en común. Explica que el líder espiritual sirve a los demás y guía a la gente hacia donde Dios quiere que estén, dependiendo del Espíritu Santo y siguiendo los pasos de Jesús al cuidar su iglesia. También señala que Dios es quien elige a los líderes espirituales y que ellos son responsables ante Dios.