Una colonia de abejas está formada por tres tipos de individuos: la reina, las obreras y los zánganos. La reina pone huevos para asegurar la conservación de la colonia. Las obreras, que son hembras sin capacidad de reproducción, se encargan del cuidado de la cría, la limpieza y la obtención de alimento. Los zánganos son los machos que habitan la colmena en primavera y verano hasta que son expulsados por las obreras.
1. Individuos biológicos de la colmena
Introducción
Una colonia de abejas bien constituida esta formada por tres clases de individuos: la
reina, las obreras y los zánganos, (Fig. 1).
La reina es una hembra sexualmente perfecta;; su misión es la de poner huevos, para
asegurar así la conservación y el desarrollo de la familia;; además, suministra a la colonia
sustancias químicas muy importantes para el mantenimiento del orden social.
Las obreras son hembras sexualmente imperfectas, que tienen sus ovarios atrofiados.
Su instinto femenino está muy desarrollado y por ello cuidan a la cría, del orden casero,
de la limpieza, y se preocupan por obtener comida diaria;; constituyen la casi totalidad de
la población y en algunos momentos pueden superar los 100,000 individuos.
Los zánganos son las abejas macho, que habitan la colmena durante la primavera y el
verano. Cuando ya no prestan utilidad las abejas obreras dejan de aceptarlos como
comensales y los echan o los matan a mordiscos y pinchazos. En una colonia fuerte, su
número oscila entre 6,000 y 10,000, (Persano, 2005).
Antecedentes
El aspecto externo de los tres habitantes de la colmena difieren entre sí, por lo que es
fácil reconocerlos a simple vista. La reina tiene un cuerpo más largo y su abdomen está
dilatado debido al desarrollo ovárico. El zángano es corpulento, su cabeza es casi
redonda y tiene muy desarrollados los ojos compuestos. La obrera es la más pequeña
de las tres, (Persano, 2005).
Fig. 1. Las tres castas: reina (izquierda), obrera (centro) y zángano (derecha).
Modificado de Persano, A.L., 2005.
2. Reina
Es la única abeja fecundada en la colmena. Es fecundada al menos una vez. Su principal
tarea es la de poner huevos, pone alrededor de 1500 a 2000 huevos al día. Las reinas
nacen en unas celdillas llamadas "Celdas reales", que son mayores que las normales.
Las obreras alimentan esta larva con jalea real lo que hace que sea fértil y se diferencie
de las obreras normales. La vida de una reina puede ser de hasta 5 años, aunque
normalmente se sustituyen de forma natural a los dos o tres años. [2] [3]
Obrera
Las obreras son las verdaderas trabajadoras de la colmena, sumen todas las funciones,
salvo la de reproducción, desde que nace una obrera va pasando por distintas tareas
dentro de la colmena: hacer cera, limpiar, alimentar, vigilar, y por último pecorear. Las
cereras, hacen y retocan las celdillas;; las alimentadoras dan de comer a las larvas y a la
reina, las limpiadoras libran de restos la colmena, las guardianas son las encargadas de
la protección, y las pecoreras son las que salen a recoger néctar y polen de las flores, y
agua. Cuando una abeja encuentra un buen lugar para pecorear, vuelve a la colmena y
mediante una danza avisa a las demás de la posición y distancia a la que se encuentra.
Las obreras son la base de la colmena. [2] [3]
Zángano
Nacen de huevos sin fecundar. Son de mayores dimensiones que la obreras, abdomen
más cuadrado y ojos grandes y contiguos. Sus funciones aparte de fecundar a la reina
son bastante discutidas, pero se piensa que ayudan a mantener el calor en la colmena y
también repartirían el néctar. [2] [3]